Tutorial de copia y clonación en resina (Parte V y última)

(English version)

PARTE I
PARTE II
PARTE III
PARTE IV
PARTE V

Ahora que tenemos el molde listo, podemos empezar a copiar (o clonar) algunas piezas.

Necesitaremos: Resina de poliuretano de fraguado rápido, vasitos de plástico desechables, palillos de madera, algún útil para remover la mezcla, guantes de látex y algunas bolsas de polietileno (de esas de la compra valen) para proteger la superficie de trabajo.

Cubro también la bandeja de vibración con polietileno. Lo bueno de este plástico es que puedes quitarle fácilmente la resina una vez fraguada.

Se suele decir que toda protección es poca. Estas gafas son muy baratas, y protegen los ojos en caso de que salte alguna gota de resina (algo bastante común al eliminar burbujas con un palillo, así que atención, y precaución).

Empiezo midiendo los mismos volúmenes de componentes A y B. No hay un método exacto para saber de antemano cuánta resina vamos a usar en un molde determinado (nunca, repito NUNCA, tratéis de medirlo con agua. Una sóla gota de agua basta para arruinar varios kilogramos de resina). Así que lo mejor es acostumbrarse a desperdiciar algo de resina cada vez que se hace una copia...

¡Una vez que los componentes están en contacto comienza a correr el tiempo! Tenéis alrededor de 120 segundos antes de que la resina se vuelva demasiado viscosa, más que suficiente. El tiempo varia en función de la temperatura ambiente. La resina catalizará más rápido a temperaturas más elevadas.

Normalmente mezclo la resina durante unos 20 segundos y la vierto inmediatamente. Es recomendable que experimentéis hasta encontrar el punto que os venga mejor, pero recordad que la resina tiene que estar completamente mezclada para obtener buenos resultados.

Enciendo la bandeja vibratoria, pongo las dos mitades de los moldes encima y comienzo a verter la resina con cuidado.

Pongo algo de resina en la otra mitad para evitar la aparición de burbujas al cerrar el molde.

Ahora quito con un palillo las burbujas que hayan quedado. Llevad las gafas de protección al hacerlo. Las burbujas que queden en el molde serán muy pequeñas, así que estaréis forzando la vista, acercándoos al molde para ver bien mientras manejáis el palillo, por lo que puede ocurrir un accidente sin que os deis ni cuenta. Recordad la máxima: "La seguridad es lo primero".

La resina empieza a fraguar. Notaréis que las cantidades grandes de resina catalizan antes que las pequeñas.

Cuando la resina esté pastosa, cierro el molde con rapidez (y decisión, ¡sin miedo!) y presiono con suavidad para que salga el exceso de resina. Hay quien llama a esto la "técnica del sándwich"

Recordad que la resina de poliuretano es muy sensible a la humedad. Es muy conveniente poner los tapones durante todas estas operaciones anteriores.

Aquí estoy clonando otra pieza. Cometí un error en la anterior, ya que no cubrí completamente el otro medio molde con resina y me han quedado algunos huecos que cubriré luego con masilla.

Esta vez me he quedado corto de resina... Bueno, no hay problema.

Preparo algo más de resina, la añado a los moldes y repito la "técnica del sándwich". Si os fijáis en la foto, veréis la utilidad de aquella pendiente suave que dejamos cuando hicimos el molde. Su función es acomodar un poco de exceso de resina, que expulsaremos al presionar el "sándwich".

Aquí está la pieza terminada. ¡Casi perfecta! Aunque han quedado unas cuantas burbujas que rellenaré con masilla en un momento.

¡Y eso es todo! Espero que este tutorial os sea de utilidad.

En nuestra próxima entrega, hablaremos de técnicas de construcción de scratch. Seguiremos el proceso paso a paso de creación de una torreta tipo T-34 para Warhammer 40K.